Horario del Centro
Contacto
Mapa del Sitio
Facebook
Twitter
www.uned.es

 

Oviedo, 9 de julio de 2015

De la naturaleza al Prerrománico

Una de las sesiones del curso de verano "Los paisajes de Asturias" ha estado dedicada a los monumentos de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO

 

Picos de Europa

Juan Carlos Menéndez Mato se dirige a los participantes en el curso frente a Santa María del Naranco.

Tras dos intensas y soleadas jornadas en el occidente asturiano -en concreto en Cangas del Narcea y Allande-, el curso estival de la UNED en la naturaleza asturiana se dirigió a Oviedo, con el fin de visitar dos iglesias fundamentales del Prerrománico: Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo.

 

Los alumnos fueron recibidos por el director del Centro Asociado de la UNED en Asturias, Juan Carlos Menéndez Mato, quien destacó la importancia de este curso, que se han convertido en un clásico de la oferta estival del Centro.

 

El programa ofrece una visión de conjunto de la riqueza paisajística de la región, a través de un recorrido por los Picos de Europa y por otros espacios naturales relevantes del Principado de Asturias, como los concejos de Cangas del Narcea y Allande y el enclave ovetense de los monumentos prerrománicos.

 

En la actividad, dirigida por el profesor Antonio Fernández, participan alumnos de toda España, algunos de los cuales tratan de repetir todos los años. El contenido y las visitas se renuevan en cada edición, por lo que siempre tienen algo nuevo que descubrir.

 

Santa María del Naranco

La iglesia de Santa María del Naranco, que en su origen fue el Palacio de Ramiro I (842-850), es la construcción más emblemática del Arte Asturiano. Los alumnos pudieron disfrutar de su belleza y conocer sus valores artísticos, además de las incógnitas que encierra su historia, que puso de relieve el co-director del curso, Gonzalo González Villarías, despertando la curiosidad de los asistentes.

 

¿Palacio, iglesia, pabellón real? La finalidad primigenia de este monumento no está clara. Otra de las dudas que permanece tiene que ver con su cercanía de la iglesia de San Miguel de Lillo. Solo 300 metros separan a ambos edificios. Demasiada distancia para formar una misma fortaleza defensiva, pero, al mismo tiempo, resulta extraño edificar dos iglesias o dos palacios tan cerca sin que tuvieran relación alguna.

 

Pablo Núñez

Los paisajes de Asturias: del occidente al oriente
CA Asociado Asturias. Gijón

 

Más información y matrícula

Otros cursos de verano