Genji-e

Grabados japoneses sobre el príncipe Genji

 

 

Genji-e

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Exposición

Los emblemas de Genji

Datos de los grabados

Cartel

En esta exposición se presenta una colección de grabados japoneses (ukiyo-e) sobre el príncipe Genji de la colección  del Profesor E. Bujalance.

La palabra ukiyo, hace referencia al mundo artístico que se desarrolló en el centro urbano de Edo (actualmente Tokio) y de Osaka, y que constituía un mundo aparte. Las raíces del Ukiyo-e surgen del desarrollo urbano que tuvo lugar a finales del siglo XVI en Japón.  El ukiyo-e empezó  siendo utilizado como ilustración, pero pronto se convirtió en una obra de arte  impresa a una sola página, que se enmarcaba. Esta forma de arte alcanzó su mayor grado de popularidad en la cultura metropolitana de Edo durante la segunda mitad del siglo XVII. A mediados del siglo XVIII, la técnica permitía la producción de impresos a todo color, llamados nishiki-e.

El ukiyo-e era accesible para la mayoría de la gente, ya que podía ser impreso en grandes tiradas. El tema original que representaban los ukiyo-e era la vida de la ciudad, particularmente actividades y escenas cortesanas de lugares de entretenimiento, como el  teatro de kabuki; también se hacian grabados inspirados en leyendas, mitos  hechos históricos. Más adelante se hicieron populares los retratos paisajistas.

Los grabados sobre el príncipe Genji  han tenido una larga tradición en Japón. No llegó a transcurrir un siglo desde que Murasaki Shikibu escribió su obra, a principios del siglo XI, hasta que aparecieron las primeras ilustraciones que se basaban en este tema.

En el siglo XII, aparecieron los primeros rollos pintados y libros ilustrados. Más tarde, en las eras  Kamakura y Muromachi, ya se pintaban escenas de la historia en biombos, abanicos y muebles. En la era Edo, se hizo popular el grabado de madera. En 1650, Harumasa Yamamoto (1610 - 82), que era un trabajador distinguido en la laca de oro, publicó un  volumen impreso con grabados en madera: El  Libro de la Historia de Genji, que estaba compuesto de 227 pinturas y su propio texto editado.

A mediados del siglo XIX, la representación del príncipe Genji sufre una profunda transformación alejándose de las fuentes literarias y adaptándose a un modelo de galán masculino que vestía ropa lujosa y se peinaba con la característica coleta, similar a la que llevaban los samuráis.  Este príncipe siempre aparece rodeado de bellas mujeres.

En los grabados de estos años la escena suele reproducir lujosas residencias de exquisitos interiores.